REFLEXIONES DESDE EL CORAZÓN
EL RIDÍCULO DE CASI TODOS LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN
Gervasio Portilla | 10.11.2024
Los mismos medios de comunicación en diferentes formatos, una gran parte, en América y más aún en Europa, que han ocultado y quitado importancia durante cinco años, la situación cognitiva de Joe Biden, desde el inicio de la campaña electoral que le llevó a la Casa Blanca y por supuesto durante su mandato, lo que era un auténtico escándalo, porque significaba que Biden, no gobernaba y realmente no se conocía quién ha estado durante todo este tiempo al frente de la nación más poderosa del mundo, lo que es de máxima gravedad; los mismos medios, han hecho un ridículo espectacular, apoyando la desastrosa campaña de Kamala Harris.
Es decir, la población norteamericana en una importante parte, no han creído a esa parte de los medios, que han lanzado todo tipo de avisos, y “bulos” contra Donal Trump.
La gente sencilla, la clase media y trabajadora, que ve cómo cada vez sus ciudades son más peligrosas, donde las drogas, el fentanilo, arrasa a la juventud, donde los objetivos del Gobierno son otros muy diferentes a sus necesidades: la libertad, la seguridad, el control de precios, la defensa de la vida y otros muchos, han mandado a un Partido Demócrata al rincón de la historia a pensar, y pedir perdón de su radicalización absurda en beneficio de las élites y de la ingeniería social.
Es decir, una parte del pueblo norteamericano, a mandado a la “porra” a Soros, Bill Gates, Clinton y cia, porque se han dado cuenta, que han querido usurpar su libertad, su forma de vivir y sentir y sus derechos en beneficio de normas e ideologías fuera del sentido común.
La soberbia es mala consejera, pero tanto los medios de comunicación ahora tan tristes como los famosos magnates, que se han querido meter en las vidas de los ciudadanos estadounidenses, seguirán en lo mismo, pero cada vez más devaluados y con menos credibilidad.
Todo será distinto, aunque los mismos seguirán con sus “matracas”, eso sí, fuera de la realidad de las personas de bien.
Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista