REFLEXIONES DESDE EL CORAZÓN
DESVERGÜENZA Y RIDÍCULO
Gervasio Portilla | 08.08.2024
Desvergüenza, ridículo, situación esperpéntica, más propia de un estado fallido, sobran calificativos para poder llamar a lo ocurrido en el día de hoy en Barcelona, con la aparición y desaparición del prófugo de la justicia Puigdemont.
En una nación sería, porque España, parece estar dejando de serlo, a estas horas, el Presidente del Gobierno. que se sepa de vacaciones, y ante la gravedad de lo ocurrido habría presentado su dimisión.
Los españoles de bien, una democracia que se precie, no puede consentir que se produzcan a la cara de los ciudadanos, tan claras violaciones de la ley, del sentido común y la decencia.
Ante la hora que vivimos, con un gobierno al que parece, que exclusivamente le interesa perpetuarse en el poder a costa de todo sentido del decoro y decencia, es urgente, una respuesta democrática de la sociedad civil y de los ciudadanos en general y por supuesto una unión de la oposición, porque en España, cada día que pasa asistimos atónitos a hechos que nunca hubiéramos pensado podrían ocurrir en un estado de derecho.
Menos mal, que hay jueces con dignidad, ya que según sabemos, al parecer, el Magistrado de la Sala Segunda de la Audiencia nacional Pablo LLarena, habría solicitado y obtenido de la Sala de Vacaciones del Tribunal Supremo, suspender sus vacaciones y reincorporarse a su puesto ante la presencia de Puigdemont en España.
Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista