REFLEXIONES DESDE EL CORAZÓN

 

QUE NO SEA POR FALTA DE DINERO

 

 

 

Gervasio Portilla | 12.12.2023


 

 

 

En España por dinero no hay problema, aunque luego, se nieguen fondos para atender a los enfermos de ELA, nuestro déficit público aumente y los servicios públicos cada vez funcionen peor.

Si se necesitan siete votos, se perdona deuda de 15.000 millones, se saca de la cárcel a los condenados y se permite a delincuentes hacer las leyes de su liberación.

Si se necesitan los votos del PNV que bien pudiera llamarse en adelante, el partido de los negocios vascos, se le aprueba todo lo que se necesite en materia económica, cualquier cosa, menos perder su apoyo y así podemos seguir.

Ahora toca a las Comunidades Autónomas, casi todas gobernadas por el PP, por lo tanto, tampoco hay problema para el Gobierno, no puede ser por falta del dinero y la señora Ministra Montero se presenta en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera y trata de comprar con dinero que no se tiene, voluntades, aumentando los fondos que recibirán las Comunidades Autónomas, casi un 15 por ciento, llegando a los 154.967 millones de euros, eso si, advirtiendo y amenazando al PP que si en el Senado, rechaza el techo de gasto de los próximos Presupuestos Generales, se debe de atener a todos tipo de consecuencias y por supuesto a la mayor de las miserias.

Mientras, los españoles decentes, casi todos, pagan sus impuestos puntualmente, llegan con dificultades a fin de mes, nuestros políticos juegan a “capricho” con el dinero de todos, para comprar voluntades políticas y seguir manteniendo sus “chiringuitos”.

Todo es obsceno e inmoral, pero la oposición, no es capaz de mandar con claridad un mensaje de regeneración valiente y contundente, por lo tanto, o los ciudadanos ponemos “pie en pared” con esta clase política colonizada por unos partidos que se han convertido en un fin en si mismos o la democracia real tiene menos futuro que un “caramelo a la puerta de un colegio”.

 

 

Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista