REFLEXIONES DESDE EL CORAZÓN
TREINTA AÑOS DE LA CAÍDA DEL MURO DE BERLÍN
Gervasio Portilla | 04.11.2019
Se cumple esta semana. En concreto la noche del nueve de noviembre, treinta años de la caída del muro de Berlín.
El muro de la vergüenza, causo mucho dolor por la separación de una ciudad y de un país y muchos muertos y detenidos.
Los datos son confusos, algunas fuentes hablan de 125 muertos, otras 200 al intentar franquear la alambradas, y de 3.000 detenidos por intentos de pasar a la zona occidental.
El pueblo de Alemania Oriental, apenas podía salir de la penuria, y la opresión del régimen soviético, que realmente era quien controlaba el país.
Es una pena que los jóvenes actuales, sean víctimas de la ocultación de la historia y de su manipulación, para que no conozcan que el comunismo es un régimen de terror.
El recuerdo de aquellos obsoletos vehículos que entraban de la parte oriental, haciendo sonar sus bocinas al pasar por el Check Point, celebrando la reunificación, nunca podrá ser borrado de la retina de las gentes de bien, por mucho, que el comunismo agazapado intente ocultarlo.
Pero para que el muro pudiera ser derribado, tuvieron que morir muchas personas inocentes en las cárceles horrorosas del este y muchos alemanes, jugándose la vida, pasar por otros puntos de Europa a Occidente.
La lucha por la libertad, nunca es gratis, quizá sea el hándicap actual de las nuevas generaciones, que no se dan cuenta que la libertad es débil y hay que “mimarla”.
Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista