REFLEXIONES DESDE EL CORAZÓN
MAL FUTURO PARA LA OBRA PÚBLICA EN ESPAÑA
Gervasio Portilla | 02.04.2019
Se presenta un mal futuro para la obra pública en España.
Un elemento fundamental para dinamizar la economía y mejorar la vida de los españoles.
Decimos dinamizar la economía, porque la obra pública genera muchos puestos de trabajo, tanto directos como indirectos y también aumenta la recaudación de impuestos, sociedades, IVA, etc.
La obra pública se va a ralentizar o casi parar en los próximos meses, porque el aumento disparatado del gasto público, apenas va a dejar margen para el gasto productivo, lo que realmente es un disparate.
Con todo el respeto a su persona, por supuesto, la Ministra Montero, puede dejar este país, si la dejan, como un solar, al igual que dejó la Junta de Andalucía.
Los ciudadanos españoles, debieran darse cuenta que el gasto público debe de ser controlado y que cualquier alegría fuera de tono se paga en forma posterior de pérdida de puestos de trabajo, en definitiva recesión.
Son precisamente las clases menos favorecidas, aquellas que dicen querer salvar, las más perjudicadas por este tipo de políticas.
Una política redistributiva es buena y justa, pero para poder redistribuir y mejorar prestaciones y servicios, hay que generar actividad económica, que es lo que con este tipo de medidas de gasto público, como las que propone la señora Montero no se consigue.
Las historia y los datos así lo dicen y sin embargo, algunos se empeñan en repetir error tras error en esta materia, lo que lleva a pensar que su ideología es demagógica e irrealizable y acaba siendo negativa para los ciudadanos, porque al final del ciclo, sólo se acaba repartiendo miseria y crisis.
Por lo tanto este tipo de medidas que no buscan el equilibrio y si lo buscan es a base de aumentar impuestos, son obsoletas y fracasadas
Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista