REFLEXIONES DESDE EL CORAZÓN

 

LA DESMEMORIA DE ESTE PAÍS SOBRE UNA DECISIÓN MUY PERJUDICIAL

 

 

Gervasio Portilla | 16.04.2018


 

La gran riada de estos días que esta inundando terrenos y zonas bajas del Ebro y sus afluentes, me trae a la memoria, una de las decisiones políticas más descabelladas de los últimos lustros: la suspensión del transvase del Ebro al Tajo y Segura.

Todo estaba preparado y aprobado, para que los sobrantes y manteniendo el caudal necesario pasado Zaragoza se pudiera en momentos de suficiencia hídrica realizar traspasos de agua a unas cuencas  con mucha escasez de agua como son las del Segura y del Tajo.

Las obras no perjudicaban a nadie, absolutamente a nadie, pero las mentiras y la manipulación y el entreguismo al nacionalismo catalán hizo que todo el proyecto fuera derogado por Rodríguez Zapatero.

En la población Quinto del Ebro se quedaron  tubos y tubos construidos por cierto en Cantabria, sin utilizar.

Se decía que las desaladoras iban a solucionar todo el problema, cuando a la vista está que no han solucionado nada y que por otro lado, el agua procedente de desaladoras es perjudicial para los campos; en verdad, sólo se trataba de destrozar un gran proyecto porque fue pensado por otros, en una demagogia  de la  que el nadie pide cuentas. Esto sí  que necesitaba una comisión de investigación.

Que falta de memoria tenemos los españoles, ahora,  la cuenca del Júcar apenas llega al treinta por ciento de su capacidad y el Ebro verterá millones de litros al mar totalmente desaprovechados.

Así se escribe la historia con la mentira y la manipulación, ahora, sólo falta que la construcción de alguna desaladora sirviera para otros fines como se está investigando, pero no se preocupen no se darán grandes titulares.

 

Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista