REFLEXIONES DESDE EL CORAZÓN

DESFILADERO DE LA HERMIDA: SEGUIMOS IGUAL

 

Gervasio Portilla | 18.07.2016


Un nuevo percance con desprendimiento de piedras, ha podido causar un grave accidente con consecuencias mortales; afortunadamente no ha sido así y se ha quedado en un gran susto y en daños materiales en los vehículos; me refiero al desfiladero de La Hermida.

Ya está bien, que las obras sigan demorándose y que no se acabe de asegurar al máximo los desprendimientos de piedras.

El tráfico que soporta esta ruta entre Unquera y Potes es muy alto en los meses de verano; sin embargo pasan los años, sin que se ponga remedio a los problemas que se generan en esta vía.

Que a estas alturas del siglo XXI, sigamos con el mismo problema que hace doscientos años; sólo significa que no se han puesto los medios para hacer esta ruta más segura.

Es verdad y hay que reconocerlo, que la orografía es tan difícil que evitar al cien por cien estos desprendimientos puede hacerse imposible; pero dicho esto, también es verdad que las inversiones en serio por parte del Estado en esta ruta casi han brillado por su ausencia.

Estamos cerca del Año Jubilar Lebaniego, con lo que conlleva de aumento del tráfico en esa zona y me da la impresión que las inversiones previstas seguirán demorándose.

 

Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista