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Feria de Santiago: palos en la rueda
Gervasio Portilla | 01.06.2016
Puedo entender perfectamente que no guste el mundo de los toros, puedo entender e incluso llegar a coincidir que se debiera de evolucionar a una lidia a “la portuguesa”, es decir sin ejecutar muerte; lo que no entiendo bajo ningún concepto, es que grupos políticos con tal de llevar la contraria y perjudicar, retiren una subvención de cien mil euros para la Feria de Santiago.
No quieren darse cuenta, de los cientos de puestos de trabajo en el sector servicios y hostelero a lo largo de una semana, no quieren darse cuenta del daño que pueden hacer; les importa “un bledo”.
Creo que la Asociación de Empresarios de Hostelería debiera reunirse de urgencia y tomar la decisión de ayudar a la Feria de Santiago y mostrar su total y absoluto desacuerdo con una decisión que no trae para Santander beneficio alguno.
La demagogia tiene las patas cortas y hacer oposición para oponerse a todo es fácil, lo difícil es crear y favorecer el desarrollo de las ciudades y los pueblos; es una pena tan bajo nivel político que además no conduce a nada, sólo al descrédito.
Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista