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24 de mayo de 2006


Santa Sede
Benedicto XVI se emociona pensando en que este jueves llegará a la patria de Juan Pablo II
Programa del viaje apostólico del Papa a Polonia (25-28 de mayo)
«La fe no es una marcha triunfal», explica Benedicto XVI
Indulgencia plenaria para los participantes en el encuentro de Pentecostés en el Vaticano
Declaraciones de exponentes del gobierno italiano sobre vida y familia preocupan en el Vaticano
Tres nombramientos de Benedicto XVI en el episcopado argentino
Nuevo obispo para Mao-Montecristi (República Dominicana)

Mundo
El cardenal Dias responde a los que critican la defensa del Papa de la libertad religiosa en La India
25 de mayo, Día de África

Entrevista
Alfredo Rubio y el realismo existencial

Audiencia del miércoles
Benedicto XVI presenta a «Pedro, el apóstol»

Nuevos movimientos
Fraternidad Cristiana Internacional de Enfermos Crónicos y Discapacitados Físicos
Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino

 




 


Santa Sede



Benedicto XVI se emociona pensando en que este jueves llegará a la patria de Juan Pablo II


CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Benedicto XVI no ocultó este miércoles su emoción al recordar que este jueves pisará Polonia, la «patria del querido Juan Pablo II».

Al dirigirse a los 2.000 polacos que se encontraban en la plaza de San Pedro con motivo de la audiencia general, el Santo Padre explicó que con en este segundo viaje internacional «recorreré los lugares de su vida y de su ministerio sacerdotal y episcopal».

Se trata, según confesó entre aplausos de los 35.000 presentes, de «un deseo que llevaba desde ha tiempo en el corazón» y dio gracias al Señor por esta «oportunidad».

Asimismo pidió oraciones y confío esta peregrinación apostólica a la Virgen, «tan venerada en Polonia».

«Que ella guíe mis pasos para que pueda confirmar en la fe a la querida comunidad católica polaca y alentarla para afrontar, con incisiva acción evangelizadora los desafíos actuales», dijo.

«Que María obtenga para toda la nación una nueva primavera de fe y de progreso civil, conservando siempre viva la memoria de mi gran predecesor», concluyó.

Del 25 al 28 de mayo, Benedicto XVI visitará Varsovia, Czestochowa, Cracovia, Wadowice, Kalwaria Zebrzydowska y Auschwitz.

Es su primer viaje internacional como Papa después de la visita a Alemania, en agosto pasado, con motivo de las Jornadas Mundiales de la Juventud.
ZS06052406

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Programa del viaje apostólico del Papa a Polonia (25-28 de mayo)


CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Publicamos el programa del viaje apostólico de Benedicto XVI a Polonia, que tiene lugar del 25 al 26 de mayo.


 

* * *



Jueves 25 de mayo
Fiumicino (Roma)
8.40 Salida del aeropuerto de Fiumicino (Roma) hacia Varsovia (Polonia)

Varsovia
11.00 Llegada al aeropuerto internacional de Okęcie (Varsovia). Ceremonia de bienvenida. Discurso del Santo Padre
11.45 Traslado en automóvil panorámico desde el aeropuerto internacional de Okęcie (Varsovia) a la catedral de San Juan de Varsovia
12.30 Encuentro con el clero en la catedral de San Juan de Varsovia. Discurso del Santo Padre
13.30 Traslado en automóvil panorámico desde la catedral de San Juan de Varsovia al palacio arzobispal de Miodowa
13.45 Llegada al palacio arzobispal de Miodowa

14.45 Traslado en automóvil desde el palacio arzobispal de Miodowa a la nunciatura apostólica de Varsovia
17.30 Traslado en automóvil desde la nunciatura apostólica al palacio presidencial de Varsovia
17.45 Visita de cortesía al Presidente de la República en el palacio presidencial de Varsovia
18.45 Traslado en automóvil desde el palacio presidencial a la iglesia luterana de la Santísima Trinidad de Varsovia
19.00 Encuentro ecuménico en la iglesia luterana de la Santísima Trinidad de Varsovia Saludo del Santo Padre
19.45 Traslado en automóvil desde la iglesia luterana de la Santísima Trinidad a la nunciatura apostólica de Varsovia
20.00 Llegada a la nunciatura apostólica de Varsovia

Viernes 26 de mayo
8.45 Traslado en automóvil panorámico desde nunciatura apostólica a la plaza Piłsudski de Varsovia
9.15 Llegada a la sacristía preparada en la plaza Piłsudski de Varsovia
9.30 Santa Misa en la plaza Piłsudski de Varsovia. Homilía del Santo Padre
11.45 Regreso a la sacristía preparada en la plaza Piłsudski de Varsovia
12.00 Traslado en automóvil desde la plaza Piłsudski a la nunciatura apostólica de Varsovia
12.15 Llegada a la nunciatura apostólica de Varsovia
15.15 Despedida de la nunciatura apostólica de Varsovia
15.30 Traslado en automóvil desde la nunciatura apostólica al aeropuerto de Varsovia/Okęcie
15.45 Llegada al aeropuerto de Varsovia/Okęcie
16.00 Salida en helicóptero desde el aeropuerto de Varsovia/Okęcie hacia Częstochowa

Częstochowa
17.15 Llegada al helipuerto de Częstochowa.
Traslado en automóvil desde el helipuerto de Częstochowa al convento de Jasna Góra.
17.30 Visita al santuario de Jasna Góra
Encuentro con los religiosos, religiosas, seminaristas y representantes de los movimientos y de la vida consagrada en el santuario de Jasna Góra. Discurso del Santo Padre
19.00 Traslado en automóvil desde el convento de Jasna Góra al helipuerto de Częstochowa
19.15 Salida en helicóptero desde el Helipuerto de Częstochowa hacia Cracovia

Cracovia
20.00 Llegada al helipuerto de Cracovia
Traslado en automóvil panorámico desde el helipuerto al palacio arzobispal de Cracovia
20.30 Llegada al palacio arzobispal de Cracovia

Sábado 27 de mayo
7.30 Santa Misa en privado en la capilla del palacio arzobispal de Cracovia
9.30 Salida en automóvil desde el palacio arzobispal de Cracovia hacia Wadowice

Wadowice
10.30 Llegada a Wadowice
Visita a la basílica de la Inmaculada Concepción de Wadowice
Visita a la casa natal del Papa Juan Pablo II en Wadowice
Encuentro con la población en la plaza Rynek de Wadowice. Discurso del Santo Padre

Kalwaria Zebrzydowska
11.30 Traslado en automóvil desde la plaza Rynek de Wadowice a Kalwaria Zebrzydowska
12.00 Visita al santuario de Nuestra Señora de Kalwaria, en Kalwaria Zebrzydowska

Cracovia
12.15 Traslado en automóvil desde Kalwaria Zebrzydowska a Cracovia
13.00 Llegada al santuario de la Misericordia divina de Cracovia/Łagiewniki
Visita al Santuario de la Misericorida divina de Cracovia/Łagiewniki
13.30 Traslado en automóvil desde el santuario de la Misericordia divina de Cracovia/Łagiewniki al palacio arzobispal de Cracovia
13.45 Llegada al palacio arzobispal de Cracovia
17.45 Traslado en automóvil panorámico desde el palacio arzobispal de Cracovia a la catedral de Wawel
18.00 Visita a la catedral de Wawel
18.30 Traslado en automóvil panorámico desde la catedral de Wawel al parque de Błonie, en Cracovia
18.45 Llegada al parque de Błonie, en Cracovia
Encuentro con los jóvenes en el parque de Błonie, en Cracovia
20.15 Traslado en automóvil desde el parque de Błonie al palacio arzobispal de Cracovia
20.30 Llegada al palacio arzobispal de Cracovia

Domingo 28 de mayo
9.00 Traslado en automóvil panorámico desde el palacio arzobispal al parque de Błonie, en Cracovia
9.30 Llegada a la sacristía preparada en el parque de Błonie, en Cracovia
9.45 Santa Misa en el parque de Błonie, en Cracovia. Homilía del Santo Padre
Rezo del Regina Cæli en el parque de Błonie, en Cracovia Palabras del Santo Padre
12.00 Regreso a la sacristía preparada en el parque de Błonie, en Cracovia
12.15 Traslado en automóvil panorámico desde el parque de Błonie al palacio arzobispal de Cracovia
12.30 Llegada al palacio arzobispal de Cracovia
15.45 Despedida del palacio arzobispal de Cracovia
16.00 Salida en automóvil desde el palacio arzobispal de Cracovia hacia Auschwitz

Auschwitz
17.00 Llegada al campo de concentración de Auschwitz
Visita al campo de concentración de Auschwitz
Visita al Centro de diálogo y oración en Auschwitz
17.30 Oración en memoria de las víctimas en el campo de concentración de Birkenau. Oración y Discurso del Santo Padre
18.30 Salida en automóvil desde el campo de concentración de Birkenau hacia el aeropuerto de Balice (Cracovia)

Cracovia
19.15 Llegada al aeropuerto de Balice (Cracovia)
Ceremonia de despedida en el aeropuerto de Balice (Cracovia). Discurso del Santo Padre
20.00 Salida desde el aeropuerto de Balice (Cracovia) hacia Ciampino (Roma)

Ciampino (Roma)
21.15 Llegada al aeropuerto de Ciampino (Roma)
ZS06052412

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«La fe no es una marcha triunfal», explica Benedicto XVI
Muestra cómo Pedro, «el pescador», se convirtió en «el apóstol»

CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- «La fe no es una marcha triunfal, sino un camino salpicado de sufrimientos y de amor», explicó Benedicto XVI este miércoles en la audiencia general.

Dedicó su intervención ante más de 35.000 peregrinos, congregados en la plaza de San Pedro, a explicar la manera en que el primer Papa, san Pedro, pasó de ser «el pescador» de Galilea a convertirse en «el apóstol».

«También Pedro tiene que aprender que es débil y que necesita perdón», explicó recordando el pasaje en el que, antes de la crucifixión, renegó de Jesús.

«Cuando finalmente se le cae la máscara y entiende la verdad de su corazón débil de pecador creyente, estalla en un llanto de arrepentimiento liberador. Tras este llanto ya está listo para su misión», aclaró el Papa.

La meditación se centró en dos momentos decisivos del apóstol que llegaría a ser el primer obispo de Roma: la multiplicación de los panes y el momento, en el que tras la resurrección, Jesús le llama a ser pastor de la Iglesia universal.

«La generosidad impetuosa de Pedro no le libra, sin embargo, de los peligros ligados a la debilidad humana. Es lo que también nosotros podemos reconocer basándonos en nuestra vida», indicó el Santo Padre.

Antes de la cruz, «también él cede al miedo y cae: traiciona al Maestro», evocó. «La escuela de la fe no es una marcha triunfal, sino un camino salpicado de sufrimientos y de amor, de pruebas y fidelidad que hay que renovar todos los días».

«Pedro, que había prometido fe absoluta, experimenta la amargura y la humillación del que reniega: el orgulloso aprende, a costa suya, la humildad», indicó, mostrando la clave que hizo de Pedro un apóstol.

Fe así, como «en una mañana de primavera», a orillas del Lago de Tiberíades, Jesús, tras la resurrección, le confió esa misión. Benedicto XVI revivió el diálogo de las tres preguntas de Jesús a Pedro, «¿me amas más que éstos».

El pescador ha dejado atrás la vehemencia que le caracterizaba y ahora reconoce sus límites. Explicando el juego de palabras que se esconde tras los verbos originales griegos, el Papa llegó a la última respuesta: «Señor, tú lo sabes todo, tu sabes que te quiero».

«¡Parecería que Jesús se ha adaptado a Pedro, en vez de que Pedro se adaptará a Jesús! Precisamente esta adaptación divina da esperanza al discípulo, que ha experimentado el sufrimiento de la infidelidad».

«De aquí nace la confianza, que le hace ser capaz de seguirle hasta el final», incluida la muerte en la ciudad eterna, dijo por último.

«De los ingenuos entusiasmos de la adhesión inicial, pasando a través de la experiencia dolorosa de la negación y del llanto de la conversión, Pedro llegó a fiarse de ese Jesús que se adaptó a su pobre capacidad de amor».

«Y nos muestra también a nosotros el camino, a pesar de toda nuestra debilidad. Sabemos que Jesús se adapta a esta debilidad nuestra. Nosotros le seguimos, con nuestra pobre capacidad de amor y sabemos que Jesús es bueno y nos acepta», concluyó el Santo Padre.
ZS06052405

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Indulgencia plenaria para los participantes en el encuentro de Pentecostés en el Vaticano
Que les reunirá con el Papa para celebrar la solemne liturgia de las vísperas

CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Podrán ganar indulgencia plenaria todos los participantes del encuentro que, en la víspera de Pentecostés, el próximo 3 de junio, celebrará en la Plaza de San Pedro (del Vaticano) el Papa con los movimientos eclesiales y nuevas comunidades de todo el mundo.

Así lo ha establecido la Penitenciaría Apostólica, acogiendo la petición que hizo el presidente del Consejo Pontificio para los Laicos, el arzobispo Stanislaw Rylko.

De esta forma, se «amplía» la indulgencia plenaria ya prevista por el «Enchiridion Indulgentiarum» para la Solemnidad de Pentecostés.

La indulgencia plenaria se concede, según el Enchiridion, «al fiel que, en iglesia u oratorio, participe devotamente en el canto o en el rezo solemne del himno “Veni, Creator”... en la solemnidad de Pentecostés».

El prelado polaco pidió que todos los fieles que el próximo 3 de junio, víspera de Pentecostés, reunidos en torno al Vicario de Cristo, el Papa Benedicto XVI, participen en el Encuentro mundial de los Movimientos eclesiales y nuevas Comunidades, pudieran en esta ocasión obtener el don de la indulgencia plenaria.

Se confirma que tales fieles podrán ganar dicha indulgencia «aunque no puedan entrar en la Patriarcal Basílica Vaticana», según ha establecido la Penitenciaría Apostólica, cuya Declaración lleva la firma del cardenal Francis Stafford --penitenciario mayor--.

El documento recuerda que para ganar la indulgencia plenaria, aparte de realizar la obra específica --el rezo solemne o el canto del «Veni, Creator»--, se requiere «ánimo separado de cualquier pecado y cumplimiento de las condiciones acostumbradas (Confesión sacramental, Comunión eucarística y oración por las intenciones del Sumo Pontífice)».

El «Código de derecho canónico» (c. 992) y el «Catecismo de la Iglesia católica» (n. 1.471), definen: «La indulgencia es la remisión ante Dios de la pena temporal por los pecados, ya perdonados, en cuanto a la culpa, que un fiel dispuesto y cumpliendo determinadas condiciones consigue por mediación de la Iglesia, la cual, como administradora de la redención, distribuye y aplica con autoridad el tesoro de las satisfacciones de Cristo y de los santos».

«La indulgencia es parcial o plenaria según libere de la pena temporal debida por los pecados en parte o totalmente» --sigue--; «todo fiel puede lucrar para sí mismo o aplicar por los difuntos, a manera de sufragio, las indulgencias tanto parciales como plenarias».

El encuentro del 3 de junio (V. Zenit, 21 mayo 2006) es el segundo de estas características en la historia, después del que convocó Juan Pablo II en Pentecostés en 1998, al que respondieron con su presencia más de cien mil personas en la Plaza de San Pedro.

El Consejo Pontificio para los Laicos ha confirmado que responsables de un centenar de movimientos y comunidades eclesiales expresaron su gratitud al Santo Padre por la invitación y brindaron al dicasterio su disponibilidad para colaborar en la realización del evento.

Desde la convocatoria de Benedicto XVI, se puso en marcha una intensa colaboración de los movimientos y comunidades eclesiales con el citado Consejo Pontificio y se anunciaron grandes peregrinaciones procedentes de Italia y de otros países de las Comunidades Neocatecumenales, de Comunión y Liberación, de la Obra de María (Focolares) y de diversas realidades de la Renovación Carismática Católica.

Igualmente se adhirieron enseguida «y estarán presentes con sus respectivas peregrinaciones» muchos otros, tales como Regnum Christi, Cursillos de Cristiandad, la Comunidad de San Egidio, el movimiento de Schöenstatt, el Movimiento de Vida Cristiana, la Comunidad de Emmanuel, el Arca, Fe y Luz, y Talleres de Oración y Vida, según parte de la enumeración del dicasterio.

[Información adicional y programa del encuentro en www.laici.org]
ZS06052402

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Declaraciones de exponentes del gobierno italiano sobre vida y familia preocupan en el Vaticano
Promueven la apertura al reconocimiento de parejas homosexuales y a la píldora abortiva

CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Declaraciones de dos exponentes del nuevo gobierno italiano sobre delicadas cuestiones ligadas a la familia y a la vida en su fase incipiente han suscitado la preocupación de «L'Osservatore Romano».

Familia y parejas de hecho
En la edición cotidiana italiana del 23 de mayo, el diario de la Santa Sede aparece un artículo con el título «Acrobacias dialécticas en perjuicio de la familia», en el que se critican las declaraciones de la nueva ministra de la Familia, Rosy Bindi, que abrían la posibilidad al reconocimiento «público» de «parejas de hecho», incluidas las homosexuales.

El artículo comienza constatando que la ministra comienza su misión abordando este argumento, con fuertes implicaciones ideológicas, en lugar de responder a los «numerosos problemas que hay que afrontar en el país, en particular, los que afectan a las muchas dificultades que las familias italianas tienen que afrontar diariamente».

El diario vaticano hace, además, «dos consideraciones».

En primer lugar, afirma, «es necesario, en el debate, distinguir entre parejas heterosexuales y homosexuales». En el caso de las primeras, la cuestión ya esta reglamentada, aclara, pues para eso existe el matrimonio.

De lo contrario, añade, «no se comprende por qué el Estado tiene que intervenir en la esfera privada y tutelar públicamente a quien se niega a ello».

En segundo lugar, señala, da la impresión de que las parejas de hecho heterosexuales son utilizadas como excusa para introducir el reconocimiento de las parejas homosexuales.

A estas parejas, explica el cotidiano, «un reconocimiento público les daría un arma formidable para acreditar la existencia de una forma alternativa de familia. Y, donde hay familia, inevitablemente, antes o después, hay hijos. Y sus derechos», afirma.

Píldora abortiva
En la edición del 24 de mayo, «L'Osservatore Romano» responde a las declaraciones del pasado lunes de la ministra de la Salud, Livia Turco, que se ha declarado favorable a experimentar la introducción de la píldora Ru486, «el fármaco que provoca el aborto y que debería ser una alternativa más segura al aborto practicado con una intervención quirúrgica», afirma el diario.

«No se ha dado ninguna novedad científica sobre este fármaco --añade--, que se ha convertido en un "homicidio a la ligera": sólo se trata de ofrecer a la mujer la posibilidad de escoger el arma. Un arma más veloz da al homicida el consuelo de no pensar mucho en ello».

El periódico pide a los ministros en general que antes de hablar analicen las implicaciones «para no herir la sensibilidad de quien no tiene la misma opinión. Sobre temas como éstos, en vez de ejercer inmediatamente la codiciada potestad política, habría que comprobar las diferentes sensibilidades de los gobernados».
ZS06052404

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Tres nombramientos de Benedicto XVI en el episcopado argentino


CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Benedicto XVI ha efectuado tres nombramientos en el episcopado argentino, según informó este miércoles la Sala de Prensa de la Santa Sede.

El Santo Padre ha normado obispo de La Rioja a monseñor Roberto Rodríguez, de 69 años, actualmente obispo de Villa María (Córdoba).

Asimismo, ha elegido como obispo de Azul al padre Hugo Manuel Salaberry, jesuita de 54 años, actual presidente del Consejo Superior de Educación Católica (CONSUDEC).

Por último, ha nombrado obispo auxiliar de Buenos Aires al reverendo monseñor Oscar Vicente Ojea, de 59 años, actual párroco de Nuestra Señora del Socorro, en Buenos Aires.

Además, el Santo Padre aceptó la renuncia de monseñor Emilio Bianchi di Cárcano al gobierno pastoral de la diócesis de Azul, presentada oportunamente por haber alcanzado la edad que establecen las normas canónicas.

Según informa la agencia católica Aica, con estos nombramientos los obispos argentinos son ahora 105 y quedan vacantes las diócesis de San Miguel, Santo Tomé y Villa María.

Monseñor Roberto Rodríguez, obispo electo de La Rioja
Monseñor Roberto Rodríguez nació en Adrogué, provincia de Buenos Aires, el 14 de agosto de 1936.

Ingresó en el Seminario Mayor Nuestra Señora de Loreto, de Córdoba, a punto de concluir la carrera de Ingeniero Aeronáutico en la Universidad Nacional de Córdoba.

Tras obtener la licenciatura en Teología por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, regresó al país y el 31 de enero de 1970 fue ordenado sacerdote en Cosquín, provincia de Córdoba.

Fue designado superior y luego rector del seminario menor de Córdoba, Nuestra Señora del Rosario del Milagro, ubicado en Jesús María, cargo que ejerció hasta 1988. Ese mismo año fue nombrado vicario general de la arquidiócesis de Córdoba y encargado del área del apostolado de los laicos y de la cultura.

El 12 de noviembre de 1992 Juan Pablo II lo nombró obispo titular de Pertusa y auxiliar de Córdoba. Recibió la ordenación episcopal el 22 de diciembre de 1992 en la catedral de Córdoba de manos del cardenal Raúl Francisco Primatesta, y de los obispos co-consagrantes Estanislao Karlic y Jesús Arturo Roldán.

Monseñor Rodríguez fue el principal animador de los Encuentros de Constructores de la Sociedad, que anualmente se realizaron en Tanti (Córdoba), organizados por la Comisión Episcopal de Pastoral Social y por el arzobispado de Córdoba.

Es presidente de la Comisión de Pastoral Universitaria y miembro de la Comisión de Pastoral Social, ambas de la Conferencia Episcopal Argentina. Tuvo parte destacada en la constitución de la Comisión de Pastoral Scout Católica, nuevo encuadramiento del movimiento scout católico de la Argentina, del que ahora es capellán nacional.

El 23 de junio de 1998, el Papa lo trasladó a la diócesis de Villa María, en la que sucedió a monseñor Alfredo Guillermo Disandro, como cuarto obispo de esta sede episcopal, de la que tomó posesión el 13 de septiembre de ese mismo año.

En la Conferencia Episcopal Argentina fue presidente de la Comisión de Pastoral Universitaria y miembro de la Comisión de Pastoral Social. Tuvo parte destacada en la constitución de la Comisión de Pastoral Scout Católica, nuevo encuadramiento del movimiento scout católico de la Argentina, del que fue capellán nacional. Fue también presidente de la Comisión Episcopal de Educación Católica. En la asamblea plenaria fue elegido nuevamente presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Universitaria.

Monseñor Roberto Rodríguez será el sexto obispo de La Rioja, donde sucede a monseñor Fabriciano Sigampa que fue promovido a la arquidiócesis de Resistencia.

Monseñor Hugo Manuel Salaberry, S.J., obispo electo de Azul
Nació el 7 de marzo de 1952 en San Andrés de Giles, provincia de Buenos Aires. A los 24 años de edad ingresó en la Compañía de Jesús.

El 3 de diciembre de 1985 fue ordenado sacerdote. Hizo la profesión solemne en la Compañía de Jesús el 15 de agosto de 1989.

Obtuvo la licenciatura en Filosofía y el bachillerato en Teología en la Universidad del Salvador, de Buenos Aires. Además, es versado en música y enseñó piano en su ciudad natal, antes de su ingreso en la vida religiosa.

En 1990 fue nombrado Superior de la residencia de los Padres Jesuitas en la ciudad de Posadas (Misiones) y párroco de Nuestra Señora de Itatí en la capital de Misiones.

El 25 de septiembre de 1998 la Conferencia Episcopal lo nombró presidente del Consejo Superior de Educación Católica (CONSUDEC), cargo que ocupa hasta ahora.

Actualmente reside en la comunidad jesuita Regina Martyrum, en Buenos Aires.

Monseñor Hugo Salaberry será el quinto obispo de Azul.

Monseñor Oscar Vicente Ojea, obispo electo de Suelli y auxiliar de Buenos Aires
Nació en Buenos Aires el 15 de octubre de 1946. Tras completar sus estudios eclesiásticos en los seminarios Menor y Mayor de Buenos Aires, fue ordenado presbítero en Buenos Aires el 25 de noviembre de 1972. Obtuvo el título de Bachiller en Teología en la Pontificia Universidad Católica Argentina “Santa María de los Buenos Aires”.

Desde su ordenación ejerció su ministerio pastoral como vicario parroquial en diversas parroquias porteñas: María Reina (1973-1975), San José de Flores (1975-1977), Nuestra Señora de la Piedad (1977-1979), San Benito Abad (1979-1981) y Patrocinio de San José (1981-1982). Luego fue párroco de Santa Magdalena Sofía Barat (1986-1987), Santa Rosa de Lima (1987-1994) y Nuestra Señora del Socorro (1994-2000).

El 17 de abril de 2000 fue nombrado párroco de Nuestra Señora del Socorro, cargo en el que se desempeña hasta hoy.

Además de su actuación pastoral parroquial fue superior de comunidad en el Seminario de Villa Devoto, asesor arquidiocesanao del Movimiento Familiar Cristiano, viceasesor del secretariado arquidiocesano para la Familia, miembro de la Comisión arquidiocesana de preparación del curso anual del Clero Joven, decano del Decanato 3 “Norte”, miembro del Consejo Presbiterial, y Párroco consultor.

En setiembre de 1995 el Santo Padre Juan Pablo II lo distinguió con el título de Prelado de Honor de Su Santidad, incorporándolo así a la Familia Pontificia.
ZS06052420

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Nuevo obispo para Mao-Montecristi (República Dominicana)


CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Benedicto XVI ha nombrado obispo de Mao-Montecristi (República Dominicana) a monseñor Diomedes Espinal de León, hasta ahora obispo auxiliar de Santiago de los Caballeros.

Sustituye a monseñor Jerónimo Tomás Abreu, quien presentó su renuncia al gobierno pastoral por razones de edad.

Monseñor Diomedes Espinal de León nació en 1949 en Villa Trina (Espaillat), diócesis de Santiago de los Caballeros.

Ordenado sacerdote en 1970, en la misma diócesis de Santiago de los Caballeros, se licenció en Filosofía en la Universidad Católica «Madre y Maestra» (1970-1974), y en Ciencias Religiosas en el Seminario Pontificio Santo Tomás de Aquino (1974-1978). En 1997 se licenció en Derecho Canónico en la Universidad Pontificia de Salamanca (España).

En el seminario menor San Pío X de Santiago de los Caballeros ha sido vicerrector (1978-1979) y rector (1979-1984). Fue formador en el seminario mayor Santo Tomás de Aquino de 1986 a 1989, y después de 1992 a 1995. De 1997 a 2000 ha sido rector.

Elegido obispo auxiliar Santiago de los Caballeros por Juan Pablo II el 20 de abril de 2000, es presidente de la Comisión Episcopal de la Formación Humana y Religiosa y delegado de la Conferencia Episcopal Dominicana en el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y miembro de la Comisión para el Seminario Mayor.

La diócesis de Mao-Montecristi tiene 400.000 habitantes, de los cuales 385.000 se declaran católicos, asistidos por 35 sacerdotes y 78 religiosos.
ZS06052409

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Mundo



El cardenal Dias responde a los que critican la defensa del Papa de la libertad religiosa en La India


BOMBAY, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Recién nombrado prefecto de la Congregación vaticana para la Evangelización de los Pueblos, el cardenal indio Ivan Dias ha respondido a las críticas de una «pequeña fracción político-religiosa» de su país lanzadas a Benedicto XVI por su rechazo a las leyes contrarias a la libertad religiosa.

Difundida el martes por la Conferencia de los Obispos Católicos de la India (CBCI), la declaración del purpurado indio recuerda las palabras que pronunció el Papa el pasado jueves cuando recibió al nuevo embajador de la nación ante la Santa Sede.

«Las inquietantes señales de intolerancia religiosa que han preocupado a algunas regiones de la nación, incluyendo el reprensible intento de legislar restricciones claramente discriminatorias acerca del derecho fundamental a la libertad religiosa, deben ser firmemente rechazadas no sólo como inconstitucionales, sino también como contrarias a los ideales más elevados de los padres fundadores de La India, quienes creyeron en una nación de coexistencia pacífica y tolerancia mutua entre diferentes religiones y grupos étnicos», dijo el Santo Padre, según transcribe el cardenal Dias.

Vistas algunas críticas lanzadas --a raíz de estas palabras-- por «una pequeña fracción político-religiosa (no representativa) de la mayoría religiosa de La India», el cardenal Dias recalca que «la libertad de conciencia y el derecho a profesar, practicar y propagar libremente la religión de cada uno han sido consagrados en la Constitución india».

Y ello no es sino «una afirmación de los derechos humanos de los que todo hombre, mujer y niño es titular».

En cualquier caso, el purpurado hace hincapié que las conversiones «nunca deben ser inducidas por la fuerza, fraude o medios de atracción»; de hecho, la Iglesia católica considera tales conversiones «inválidas».

«Pero cualquier oposición de ley o de hecho a una conversión genuina, además de constituir una grave violación a los derechos humanos y al espíritu de la Constitución India, es, sobre todo, una injustificada interferencia en la competencia única de Dios en la cuestión», advierte.

Por todo ello, el cardenal Dias considera «imperativo que se pida al citado grupo» la prueba de una sola conversión forzada a la Iglesia católica en el país. «Todos los alegatos hechos al respecto en el pasado se han probado completamente falsos», recuerda.

Iglesia católica en La India: entrega, no proselitismo

1.095 millones de habitantes tiene La India, hindúes en un 80,5% y musulmanes en un 13,4%.

Los cristianos «sólo» representan el 2,3% de la población (1,8% del total de habitantes del país es católico), pero a pesar de ser una «diminuta minoría» «atienden el 20% de toda la educación primaria del país, el 10% de los programas comunitarios de alfabetización y sanidad, el 25% de la atención de los huérfanos y viudas, y el 30% del cuidado de los discapacitados, leprosos y pacientes con Sida», enumera el purpurado.

«La gran mayoría de quienes se valen de estas instituciones» pertenecen a religiones distinta del Cristianismo --añade--. Tales instituciones son «muy apreciadas por hindúes, musulmanes» y miembros de otros credos --o de ninguno--, «quienes admiran a los cristianos por su servicio desinteresado por los que sufren, los marginados, los analfabetos y los oprimidos».

Así que «el susodicho grupo haría bien en examinar cuánto está haciendo a favor de la elevación educativa, sanitaria y social del pueblo indio --propone el cardenal Dias--, y no debería tomarse a mal que algunos miembros de la mayoría religiosa en La India (y de otras comunidades además) se sientan atraídos a seguir una religión cuyo fundador», Jesucristo, «dijo a sus seguidores que había venido no a ser servido, sino a servir, y les mandó que se amaran unos a otros como Él les había amado».

Ese «grupo también podría hacer un estudio sobre cuántos millones de personas que han pasado por las instituciones educativas, sanitarias o sociales católicas en La India desde tiempo inmemorial --¡y ello incluye a renombrados jueces y abogados, médicos y enfermeras, líderes políticos y religiosos, e incluso algunos destacados miembros del propio grupo!-- se han convertido, o se les pidió que se convirtieran, al Cristianismo», prosigue.

«Encontrarían entonces la razón por la que, después de dos mil años de presencia cristiana en La India y de diligente actividad de sus miembros a favor de la población local, el número de cristianos sigue siendo extremadamente pequeño en el país», puntualiza.

«Si el citado grupo no es capaz de responder a estos puntos satisfactoriamente, haría bien en reconsiderar su actitud de profundo prejuicio hacia la comunidad cristiana, y avergonzarse de los ataques, tanto verbales como físicos, que algunos de sus miembros lanzan a personalidades e instituciones cristianas en varios Estados del país», advierte el cardenal Ivan Dias.

Las quejas: del partido nacionalista-fundamentalista BJP

También el martes el servicio informativo del episcopado indio (ICNS) explicaba que Rajnath Singh, presidente del BJP [«Bharatiya Janata Party», partido nacionalista que respalda una visión fundamentalista del hinduismo y es el mayor en la oposición en el país. Ndr] había escrito al Papa diciendo que sus comentarios sobre las leyes anti-conversión en La India habían «dolido» en el país.

Tal misiva seguía a varias protestas de líderes del BJP por las declaraciones en las que el Santo Padre apremiaba a La India a rechazar los intentos de lanzar disposiciones «claramente discriminatorias».

Un grupo hindú quemó imágenes del Papa en varios lugares del Estado de Madhya Pradesh el sábado, contestando la «interferencia» papal en los asuntos del país.

Y es que –apunta «ICNS»-- se consideraron sus palabras como una referencia a las leyes anti-conversión (que existen en cinco Estados indios) y a los intentos de lanzar estas normas en otros Estados (Zenit, 22 mayo 2006).
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25 de mayo, Día de África
Manos Unidas publican números que hacen reflexionar

CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Conmemorando la fundación de la Organización de la Unidad Africana, OUA, el 25 de mayo se celebra el Día de África.

El último informe del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) señala que de los últimos 50 países con el Índice de Desarrollo más bajo, 40 son africanos, recuerda Manos Unidas al sensibilizar a la opinión pública sobre la situación de este continente.

Cerca de 936 millones de personas viven en África, de ellas, 315 millones lo hacen en la pobreza a pesar de las enormes riquezas del continente.

460 millones tienen dificultades para alimentarse, 50 millones pasan hambre crónica.

300 millones, en su mayoría habitantes de zonas rurales, no tienen acceso al agua potable, 313 millones, carecen de servicios básicos de saneamiento.

Más de 200.000 niños son utilizados como soldados, esclavos domésticos o dedicados a la prostitución.

Más de 78 millones de niños están sin escolarizar, la mayor parte, son niñas.

En África subsahariana hay 28 millones y medio de infectados por el VIH, de los que el 60 por ciento son mujeres.

Solo en dos conflictos: Sudán–Darfur y República Democrática del Congo, se han producido de una u otra manera, 7 millones de víctimas.

«Un continente con enormes riquezas naturales, cuya historia, cultura, leyendas y enormes posibilidades turísticas lo convierten en una fuente de recursos», afirma Manos Unidas.

Manos Unidas tiene grandes esperanzas puestas en el continente africano, en sus jóvenes y en sus mujeres, por ello en la campaña XLVI (correspondiente al año 2005) se aprobaron 327 proyectos (+18% respecto 2004), con una inversión de 14.398.985 Euros (+15% respecto al año anterior).

De ellos, 46 tenían como principales beneficiarias a mujeres en los cuatro sectores de actuación (agrícola, educativo, sanitario y social).
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Entrevista



Alfredo Rubio y el realismo existencial
Entrevista a un colaborador de este sacerdote y humanista

BARCELONA, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).-Alfredo Rubio de Castarlenas, médico y sacerdote, fue un «formador de personas» que ha dejado a su muerte una constelación de realidades (el grupo de mujeres Claraeulalias, el Ámbito de Investigación y Difusión María Corral, las murtras o casas de silencio, la Carta de la Paz.

Para adentrarnos en esta figura a los diez años de su fallecimiento hemos entrevistado a uno de sus discípulos, don Josep María Forcada Casanovas, nacido en 1941, sacerdote, doctor en Medicina y licenciado en Ciencias de la Comunicación, actualmente es prior y capellán del Hospital de la santa Creu i sant Pau de Barcelona, delegado episcopal de pastoral de la salud y presidente del Ámbito de Investigación y Difusión María Corral, además de reconocido pintor.

Recibió formación directa del padre Alfredo Rubio y fue un directo colaborador y continuador de muchos de sus proyectos.

--¿Podemos definir a Alfredo Rubio como un fundador o un profeta de nuestro tiempo?

--Forcada: Alfredo Rubio fue un formador de todo tipo de personas y un trabajador incansable, además de poseer una profunda alegría interior. Creó varias instituciones a lo largo de su vida, pero principalmente impulsó un equipo de investigación y trabajo muy diversificado tanto en las ciencias humanas como en el ámbito eclesial.

Se le conoce por la creación de la Casa de Santiago que aportó novedades a la formación sacerdotal de adultos. La principal de ellas es que la vida del que se forma para el sacerdocio se debe basar en la soledad y el silencio cotidianos.

Es menos conocido pero igualmente importante que, posteriormente, impulsó grupos de sacerdotes los cuales, para poder anclar su vida en un tiempo de soledad y silencio, forman libremente grupos donde, a modo de las antiguas colegiatas, conviven y se ayudan mutuamente para este modo de vivir apostólico y desde ahí llevan adelante las tareas pastorales que tienen encomendadas.

--Alfredo Rubio acuñó el término de «realismo existencial». ¿En qué consiste?

--Forcada: Esta expresión está tomada de uno de sus libros, «22 historias clínicas --progresivas-- de realismo existencial» que escribió en Hermosillo (México) en 1981. El tema de «que cualquier cosa distinta de las que incidieron en nuestro origen habría ocasionado que no existiéramos», subyace a toda la obra, es decir, somos seres contingentes, no necesarios de existir.

Esta actitud vital, por una parte, se inscribe en la línea de la filosofía realista –«soy quien soy y como soy o no sería» de modo que, en otra época u otro país, existiría otra persona pero no yo- y por otra, es una superación del existencialismo en sentido positivo que produce esperanza pues, encontrándose uno en la existencia, en vez de mirar solamente hacia la muerte, lo hace humildemente hacia su propio origen y ve que existe, sí, pero podría no haber existido. Es a partir de la aceptación –gozosa- de la propia existencia, del pasado, de las circunstancias que han construido mi vida y esto engendra múltiples consecuencias que se podrían calificar de «nueva actitud vital».

Los no existentes no son. Esto provoca un verdadero entusiasmo; saber que te ha tocado la lotería de existir, pero a la vez te abre a una actitud crítica ante la vida.

Ante un existencialismo fatalista, el realismo existencial abre la dimensión entusiasta y gozosa de existir aunque haya dolor o muerte, precisamente por ser existentes. Sobre el realismo existencial se han desarrollado muchas tesis, trabajos, seminarios, artículos, libros.

--¿Qué es la antropología de la paz que él mismo impulsó?

--Forcada: La «Carta de la Paz, dirigida a la ONU» es un documento breve de diez puntos y una posdata. Se ha presentado en más de 80 países de cuatro continentes y en ellos se han recogido firmas de instituciones y personas que se entregan periódicamente a la secretaría de las Naciones Unidas, en Nueva York.

La antropología de la paz que allí se aplica, se sustenta en una concepción de la persona humana que, con estos valores, puede ser pacificadora: «desde la libertad, las evidencias y la amistad…».

En la Carta se señalan algunos principios que pueden ayudar a superar tantos obstáculos que cierran el paso a la paz. Como por ejemplo darse cuenta de que los contemporáneos no tenemos culpa de los males que han ocurrido en la historia por la sencilla razón de que no existíamos. Otro aspecto básico: «¿Por qué, hemos de tener y alimentar resentimientos de unos contra otros, si no tenemos ninguna responsabilidad en lo que ocurrió en la historia?».

--¿Qué estructuras y realidades permanecen de las intuiciones que él tuvo?

--Forcada: Numerosas vocaciones que él acompaño y formó son hoy sacerdotes; son más de 150 los que desempeñan diversas tareas pastorales en Europa y otros países.

También para las mujeres que desean dedicarse por entero a la evangelización encontró un camino: en 1986 fundó el grupo Claraeulalias que lo integran mujeres cristianas, unas son célibes y otras casadas que, además de vivir horas diarias de soledad y silencio, se dedican a su trabajo en la sociedad o en la Iglesia.

En cuanto a instituciones, están presentes en diversos países «Ámbito de Investigación y Difusión María Corral», «Universitas Albertiana, Interdisciplinar», la citada «Carta de la Paz», varias revistas, entre ellas «RE» sobre realismo existencial (versión castellana y catalana); las «murtras», término que él mismo acuñó y que son casas para facilitar soledad y silencio a toda persona.

La editorial Edimurtra, en la que ven la luz obras de diversos autores sobre ciencias humanas y religiosas, y además se están publicando sus numerosos escritos sobre cuestiones que atañen a los hombres y mujeres de hoy.
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Audiencia del miércoles



Benedicto XVI presenta a «Pedro, el apóstol»
Intervención durante la audiencia general

CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Publicamos la intervención de Benedicto XVI durante la audiencia general de este miércoles dedicada al tema «Pedro, el apóstol».

 

* * *




Queridos hermanos y hermanas:
En estas catequesis estamos meditando en la Iglesia. Hemos dicho que la Iglesia vive en las personas y, por ello, en la última catequesis comenzamos a meditar en las figuras de cada uno de los apóstoles, comenzando por san Pedro. Hemos visto dos etapas decisivas de su vida: la llamada en el lago de Galilea y, después, la confesión de fe: «Tú eres el Cristo, el Mesías». Como dijimos, se trata de una confesión todavía insuficiente, inicial, aunque abierta. San Pedro se pone en un camino de seguimiento. Hoy queremos considerar otros dos acontecimientos importantes en la vida de san Pedro: la multiplicación de los panes --acabamos de escuchar en el pasaje que se ha leído la pregunta del Señor y la respuesta de Pedro-- y después el pasaje en el que el Señor llama a Pedro a ser pastor de la Iglesia universal.

Comencemos con la multiplicación de los panes. Sabéis que el pueblo había escuchado al Señor durante horas. Al final, Jesús dice: están cansados, tienen hambre, tenemos que dar de comer a esta gente. Los apóstoles preguntan: «Pero, ¿cómo?». Y Andrés, el hermano de Pedro, le dice a Jesús que un muchacho tenía cinco panes y dos peces. «Pero,¿de qué sirven para tantas personas?», se preguntan los apóstoles. Entonces el Señor pide a la gente que se siente y que se distribuyan estos cinco panes y dos peces. Y todos quedan saciados. Es más, el Señor encarga a los apóstoles, y entre ellos a Pedro, que recojan las abundantes sobras: doce canastos de pan (Cf. Juan 6,12-13). A continuación, la gente, al ver este milagro --que parecía ser la renovación tan esperada del nuevo «maná», el don del pan del cielo--, quiere hacer de él su rey. Pero Jesús no acepta y se retira a rezar solo en la montaña. Al día siguiente, Jesús interpretó el milagro en la otra orilla del lago, en la sinagoga de Cafarnaúm. No lo hizo en el sentido de ser el rey de Israel, con un poder de este mundo, como lo esperaba la muchedumbre, sino en el sentido de la entrega de sí mismo: «el pan que yo voy a dar es mi carne por la vida del mundo» (Juan 6, 51). Jesús anuncia la cruz y con la cruz la auténtica multiplicación de los panes, el pan eucarístico, su manera totalmente nueva de ser rey, una manera totalmente contraria a las expectativas de la gente.

Podemos comprender que estas palabras del Maestro, que no quiere realizar cada día una multiplicación de los panes, que no quiere ofrecer a Israel un poder de este mundo, resultaran realmente difíciles, es más inaceptables, para la gente. «Da su carne»: ¿qué quiere decir esto? Incluso para los discípulos parece algo inaceptable lo que Jesús dice en este momento. Para nuestro corazón, para nuestra mentalidad, era y es algo «duro», que pone a prueba la fe (Cf. Juan 6, 60). Muchos de los discípulos se echaron atrás. Buscaban a alguien que renovara realmente el Estado de Israel, su pueblo, y no a uno que dijera: «Doy mi carne». Podemos imaginar que las palabras de Jesús fueran difíciles incluso para Pedro, que en Cesarea de Filipo se había opuesto a la profecía de la cruz. Y sin embargo, cuando Jesús preguntó a los doce: «¿Queréis iros también vosotros?», Pedro reaccionó con el empuje de su corazón generoso, guiado por el Espíritu Santo. En nombre de todos, respondió con palabras inmortales, que son también palabras nuestras: « Señor, ¿donde quién vamos a ir? Tú tienes palabras de vida eterna, y nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios» (Cf. Juan 6, 66-69)

Aquí, al igual que en Cesarea, con sus palabras, Pedro comienza la confesión de fe cristológica de la Iglesia y se convierte en voz también de los demás apóstoles y de los no creyentes de todos los tiempos. Esto no quiere decir que ya había comprendido el misterio de Cristo en toda su profundidad. Su fe era todavía inicial, una fe en camino; sólo llegaría a su verdadera plenitud a través de los acontecimientos pascuales. Si embargo, ya era fe, abierta a la realidad más grande --abierta sobre todo porque no era fe en algo, era fe en Alguien: en Él, en Cristo--. De este modo, también nuestra fe es siempre una fe inicial y tenemos que recorrer todavía un gran camino. Pero es esencial que sea una fe abierta y que nos dejemos guiar por Jesús, pues Él no sólo conoce el Camino, sino que es el Camino.

La generosidad impetuosa de Pedro no le libra, sin embargo, de los peligros ligados a la debilidad humana. Es lo que también nosotros podemos reconocer basándonos en nuestra vida. Pedro siguió a Jesús con empuje, superó la prueba de la fe, abandonándose en él. Llega sin embargo el momento en que también él cede al miedo y cae: traiciona al Maestro (Cf. Marcos 14, 66-72). La escuela de la fe no es una marcha triunfal, sino un camino salpicado de sufrimientos y de amor, de pruebas y fidelidad que hay que renovar todos los días. Pedro, que había prometido fe absoluta, experimenta la amargura y la humillación del que reniega: el orgulloso aprende, a costa suya, la humildad. También Pedro tiene que aprender que es débil y que necesita perdón. Cuando finalmente se le cae la máscara y entiende la verdad de su corazón débil de pecador creyente, estalla en un llanto de arrepentimiento liberador. Tras este llanto ya está listo para su misión.

En una mañana de primavera, esta misión le será confiada por Jesús resucitado. El encuentro tendrá lugar en las orillas del lago de Tiberíades. El evangelista Juan nos narra el diálogo que en aquella circunstancia tuvo lugar entre Jesús y Pedro. Se puede constatar un juego de verbos muy significativo. En griego, el verbo filéo expresa el amor de amistad, terno pero no total, mientras que el verbo agapáo significa el amor sin reservas, total e incondicional. La primera vez, Jesús le pregunta a Pedro: «Simón…, ¿me amas más que éstos (agapâs-me)?», ¿con ese amor total e incondicional? (Cf. Juan 21, 15). Antes de la experiencia de la traición, el apóstol ciertamente habría dicho: «Te amo (agapô-se) incondicionalmente». Ahora que ha experimentado la amarga tristeza de la infidelidad, el drama de su propia debilidad, dice con humildad: «Señor, te quiero (filô-se)», es decir, «te amo con mi pobre amor humano». Cristo insiste: «Simón, ¿me amas con este amor total que yo quiero?». Y Pedro repite la respuesta de su humilde amor humano: «Kyrie, filô-se», «Señor, te quiero como sé querer». A la tercera vez, Jesús sólo le dice a Simón: «Fileîs-me?», «¿me quieres?». Simón comprende que a Jesús le es suficiente su amor pobre, el único del que es capaz, y sin embargo está triste por el hecho de que el Señor se lo haya tenido que decir de ese modo. Por eso le responde: «Señor, tú lo sabes todo, tu sabes que te quiero (filô-se)». ¡Parecería que Jesús se ha adaptado a Pedro, en vez de que Pedro se adaptará a Jesús! Precisamente esta adaptación divina da esperanza al discípulo, que ha experimentado el sufrimiento de la infidelidad. De aquí nace la confianza, que le hace ser capaz de seguirle hasta el final: «Con esto indicaba la clase de muerte con que iba a glorificar a Dios. Dicho esto, añadió: "Sígueme"» (Juan 21, 19).

Desde aquel día, Pedro «siguió» al Maestro con la conciencia precisa de su propia fragilidad; pero esta conciencia no le desalentó. Él sabía, de hecho, que podía contar a su lado con la presencia del Resucitado. De los ingenuos entusiasmos de la adhesión inicial, pasando a través de la experiencia dolorosa de la negación y del llanto de la conversión, Pedro llegó a fiarse de ese Jesús que se adaptó a su pobre capacidad de amor. Y nos muestra también a nosotros el camino, a pesar de toda nuestra debilidad. Sabemos que Jesús se adapta a esta debilidad nuestra. Nosotros le seguimos, con nuestra pobre capacidad de amor y sabemos que Jesús es bueno y nos acepta. Pedro tuvo que recorrer un largo camino para convertirse en testigo seguro, en «piedra» de la Iglesia, al quedar constantemente abierto a la acción del Espíritu de Jesús. Pedro mismo se presentará como «testigo de los sufrimientos de Cristo y partícipe de la gloria que está para manifestarse (1 Pedro 5, 1). Cuando escribe estas palabras ya es anciano, abocado a la conclusión de su vida, que sellará con el martirio. Será capaz, entonces, de describir la alegría verdadera y de indicar dónde puede encontrarse: el manantial es Cristo, en quien creemos y a quien amamos con nuestra fe débil pero sincera, a pesar de nuestra fragilidad. Por ello, escribirá a los cristianos de su comunidad estas palabras que también nos dirige a nosotros: «Le amáis sin haberle visto; creéis en él, aunque de momento no le veáis, rebosando de alegría inefable y gloriosa; y alcanzáis la meta de vuestra fe, la salvación de las almas» (1 Pedro 1, 8-9).

[Traducción del original italiano realizada por Zenit. Al final de la audiencia, el Santo Padre dirigió estas palabras a los peregrinos de lengua española:]

Queridos hermanos y hermanas:
Pedro, así como los otros apóstoles, tuvo que recorrer un camino lento, no exento de dificultades, para seguir al Maestro. Con su respuesta de fe superó la prueba que la predicación de Cristo sobre la Eucaristía supuso para muchos de los discípulos. Sin duda la suya era una fe inicial, que llegaría a su plenitud en el momento de la Pascua. Sin embargo, el camino de la fe está lleno de sufrimientos y de amor, de pruebas y de fidelidades. Incluso Pedro llegó a conocer la amargura y la humillación de la negación, llegando a la conversión a través del arrepentimiento.

Junto al lago de Tiberíades Pedro descubre cómo Cristo resucitado se adapta a su pobre capacidad de amar y cómo podrá contar siempre con su presencia. De esto nace la esperanza y la confianza que le permitirán seguirlo hasta el final de su vida, que sellará con el martirio. Y así, él será capaz de describir la verdadera alegría e indicar la fuente dónde se puede conseguir, que es Cristo, creído y amado.

Saludo con afecto a los visitantes de lengua española, en especial a las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, que celebran su Capítulo General. Saludo también a los diversos grupos parroquiales y asociaciones de España, así como a los peregrinos de Argentina, Colombia, México y a los dominicanos de Santiago de los Caballeros, con su Arzobispo Mons. Ramón de la Rosa y Carpio. Confiad siempre en Cristo, que os ama y está presente en vuestra vida.
¡Muchas gracias!

[© Copyright 2006 - Libreria Editrice Vaticana]
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Nuevos movimientos



Fraternidad Cristiana Internacional de Enfermos Crónicos y Discapacitados Físicos


CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Publicamos la descripción que presenta el «Repertorio» de «Asociaciones Internacionales de Fieles», editado por el Consejo Pontificio para los Laicos, de la Fraternidad Cristiana Internacional de Enfermos Crónicos y Discapacitados Físicos.

 

* * *



DENOMINACIÓN OFICIAL: FRATERNIDAD CRISTIANA INTERNACIONAL DE ENFERMOS CRÓNICOS Y DISCAPACITADOS FÍSICOS

SIGLA: FCIPMH (Fraternité Chrétienne Intercontinentale des Personnes Malades Chroniques et Handicapées Physiques)

DENOMINACIÓN HABITUAL: Frater

FUNDACIÓN: 1945

HISTORIA: La Frater nació en Verdún por iniciativa del padre Henry François. Reconocida en 1957 por la Asamblea de cardenales y arzobispos de Francia, se difundió rápidamente en otros países de Europa, África, América Latina y Asia. El 11 de febrero de 1995 el Consejo Pontificio para los Laicos decretó el reconocimiento de la Fraternité Chrétienne Intercontinentale des Personnes Malades Chroniques et Handicapées Physiques como asociación internacional de fieles de derecho pontificio.

IDENTIDAD La Frater es una realidad que surgió del mismo corazón de la enfermedad y de la limitación física y del deseo de superarlas. Su objetivo central es la evangelización de la persona enferma o discapacitada, mediante las relaciones interpersonales y comunitarias (vida de grupo) y del compromiso en la edificación de una sociedad nueva fundada en el respeto de la dignidad humana. La Fraternidad logra tal finalidad mediante la participación de los mismos enfermos y discapacitados, reconociendo sus talentos estimulándoles a superar los límites impuestos por su condición, para que lleguen a ser protagonistas de la propia vida siendo conscientes de la misión que les corresponde en la sociedad y en la Iglesia. La pedagogía de la Asociación privilegia la recuperación de la autoestima, el crecimiento en el ejercicio de la ciudadanía (derechos y deberes); la formación a la vida comunitaria y la capacidad de vivir el Evangelio con un espíritu ecuménico (aceptación de las diferencias). La modalidad de acción que caracteriza la actividad de la Frater son las visitas a los enfermos o discapacitados por parte de otros enfermos o discapacitados; encuentros, retiros, cursos, jornadas de estudio y asambleas.

ESTRUCTURA: Órganos de la Frater –constituidos por los mismos enfermos crónicos y discapacitados junto a aquellos que desean compartir las aspiraciones– son el Comité intercontinental, organismo permanente representativo y responsable de toda la Fraternidad, que está formado por miembros del Equipo intercontinental, un representante de cada país afiliado, un representante de cada país no afiliado, los responsables de los equipos continentales, el Consejero intercontinental y el Viceconsejero; el Consejo intercontinental, que tiene que asistir al Comité intercontinental y está compuesto por el Equipo intercontinental, dos delegados de cada Equipo continental, un delegado por cada país que no disponga de asamblea continental, invitados propuestos por el Equipo intercontinental; el Equipo intercontinental, que tiene una función ejecutiva y está constituido por el Coordinador intercontinental, otros dos miembros enfermos crónicos o discapacitados, el Consejero intercontinental; las Asambleas continentales, lugar de investigación y de estudio de cuestiones específicas relativas a los respectivos continentes.

DIFUSIÓN: La Frater cuenta con 51 asociaciones miembros presentes en 51 países distribuidos del siguiente modo: África (12), Asia (7), Europa (12), Norteamérica (10), Sudamérica (10).

OBRAS: La Frater dirige casas de acogida y de rehabilitación en Francia, Bélgica, Brasil y España.

PUBLICACIONES Carta às nações, semestral. Las asociaciones miembros tienen publicaciones propias a nivel nacional.

SEDE CENTRAL Frater
Rua Campo Grande, 77 - Gleba Califórnia
Piracicaba/SP - CEP 13403-290 (Brasil)
Fax [+55]19.4271234
E-mail: frater@merconet.com.br
ZS06052410

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Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino


CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 mayo 2006 (ZENIT.org).- Publicamos la descripción que presenta el «Repertorio» de «Asociaciones Internacionales de Fieles», editado por el Consejo Pontificio para los Laicos, de la Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino.

 

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DENOMINACIÓN OFICIAL: FRATERNIDAD DE AGRUPACIONES SANTO TOMÁS DE AQUINO

SIGLA: FASTA

FUNDACIÓN: 1962

HISTORIA: La FASTA nació en Leones, en Argentina, por iniciativa del padre Aníbal Ernesto Fosbery, OP, como respuesta a la exhortación del Concilio Vaticano II a promover la participación de los fieles laicos en la vida y misión de la Iglesia y con el objetivo de hacer penetrar los valores cristianos en la sociedad. Originariamente denominada “Fraternidad Laical de la Orden Dominicana” y reconocida como tal por el Maestro General de la Orden en 1971, en 1993 obtuvo el primer reconocimiento diocesano por el Arzobispo de Buenos Aires. Durante más de cuarenta años la Fraternidad cumple su misión a través de iniciativas marcadas por la espiritualidad dominicana y gracias al compromiso de familias, adultos y jóvenes que en ella encuentran un espacio de salvación personal y comunitaria además de un especial protagonismo apostólico. El 29 de mayo de 1997 el Consejo Pontificio para los Laicos decretó el reconocimiento de la Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino como asociación internacional de fieles de derecho pontificio.

IDENTIDAD: La FASTA se propone la construcción de la ciudad de Dios en medio de la ciudad de los hombres –lugar en el que se decide la realización social, política, cultura, religiosa del hombre–, mediante la evangelización de la cultura, de la familia y de las jóvenes generaciones. La Fraternidad logra esta finalidad a través de una formación humana y espiritual sistemática y la educación de la persona dentro de la sociedad y consciente de los propios deberes sociales. El recorrido formativo de los miembros privilegia la dimensión sacral, para la edificación de comunidades cristianas donde se pueda hacer una experiencia viva del misterio de Dios; la dimensión sapiencial, con el fin de desarrollar una visión del mundo radicada en la sabiduría cristiana e iluminada por el Magisterio y las enseñanzas de los doctores de la Iglesia, principalmente de Santo Tomás de Aquino; la dimensión apostólica, que capacita para ponerse al servicio de la Iglesia y de la sociedad, dando testimonio de la fe en Cristo; la dimensión organizativa, como elemento indispensable de la formación de líderes preparados para actuar según los principios de la doctrina social de la Iglesia.

ESTRUCTURA: La FASTA está constituida por una rama laical y una sacerdotal. La responsabilidad de gobierno y sus obras están confiadas a los laicos, que pertenecen como miembros de derecho y como miembros de hecho. Son miembros de derecho aquellos que por vocación asumen el compromiso apostólico de la Fraternidad y cuya pertenencia es ratificada en una ceremonia oficial. Son miembros de hecho aquellos que, sin un compromiso jurídico con la Fraternidad, participan de su vida y comparten su ideal y su espiritualidad. Los miembros laicos no son consagrados, y no pronuncian votos públicos, sino que viven el propio compromiso apostólico dentro de la familia y se reúnen en los llamados convivios, para participar juntos en los sacramentos, para reflexionar, estudiar y cultivar la amistad. Los sacerdotes que pertenecen a la Fraternidad constituyen la Fraternidad Apostólica Sacerdotal Tomás de Aquino, sociedad de vida apostólica en formación, y tienen la misión de asistir a los laicos de la obra.

DIFUSIÓN: La FASTA cuenta con unas 10.000 familias que participan de su carisma y está presente en 5 países distribuidos del siguiente modo: Europa (1), Sudamérica (4).

OBRAS: La FASTA ha dado vida a una vasta red educativa constituida por dos universidades, numerosos colegios y 40 centros de formación juvenil en Argentina, España, Perú, Brasil y Chile.

PUBLICACIONES: Cumbres, periódico semestral; Buenas Nuevas, mensual.

SEDE CENTRAL: Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino
Soler, 5942 - C1425BYN Buenos Aires (Argentina)
Tel. [+54]11.47762722 - Fax 11.47760653
E-mail: privada@fasta.org.ar
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