El espectáculo de la Navidad

 

 

13/12/2025 | por Grupo Areópago


 

 

 

 

 

 

La catequista preguntó: “¿A quién esperamos en Navidad?”

Un niño respondió : “A un elfo, un duende…”.

La catequista se mostró sorprendida. Y es que un nuevo personaje ha aparecido en los últimos años en la vida de los niños semanas antes de la Navidad. Se trata de un elfo travieso que se esconde por las casas de los niños y que vigila el comportamiento de estos para recibir los regalos. El elfo cada día aparece en un sitio de la casa de forma singular, que obliga a los padres a ser creativos.

Esta divertida tradición que comienza cada 1 de diciembre y que cada vez gana más adeptos, se remonta a 2005, en Estados Unidos cuando se publicó el libro The Elf on the Shelf: A Christmas Tradition (El elfo en la estantería: una tradición navideña). Veinte años más tarde, en muchas familias de nuestro país los niños y niñas ya son partícipes de este fenómeno que nada tiene que ver con la tradición cristiana de la Navidad, tradición alejada del mensaje del Evangelio. La figura del elfo es reflejo de esta tendencia. Y es que se nos está olvidando lo que realmente se celebra en Navidad.

El tiempo de Adviento –aunque desde las primeras luces y turrones ya se llama coloquialmente Navidad- se está convirtiendo en tiempo lleno de espectáculos llenos de luces y colores. Lo que el mundo llama “Navidad” comienza antes; las ciudades compiten en quienes adornan sus calles con más luces, más espectáculos de luz y sonido, más mercadillos navideños, escaparates llamativos y productos para comprar, impulsando un consumismo que no parece que vaya a frenar. En las ciudades apenas se nota el verdadero sentido religioso de la Navidad, convirtiéndose en focos de consumo y de turismo navideño. Los signos religiosos se convierten en algo anecdótico.

La alegría, la diversión y las tradiciones festivas pueden convivir con el verdadero sentido de la Navidad, pero es necesario realizar una reflexión para poder recuperar el verdadero espíritu navideño. No se trata de prohibir el elfo sino de que los niños y adultos conozcan que en Navidad nace Jesús. Sería deseable que todos los creyentes vivamos y demos ejemplo de lo que es Navidad, sabiendo que es Dios el que se hace Niño para todos nosotros y siendo conscientes de que la verdadera alegría nos viene del Señor, hecho hombre en Belén.

El Papa Francisco en diciembre de 2023 alertaba de que corremos el riesgo de una Navidad con una idea pagana de Dios. Que el despliegue de luces, de decoraciones y de mercadillos no nos distraigan de la verdadera Navidad. “Miremos al Niño, miremos su cuna, contemplemos el pesebre, que los ángeles llaman la “señal”. (Nochebuena 2023. Papa Francisco)

 

 

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