Diócesis

 

El impactante documental “Catedral Primada. Ocho siglos de fe y esplendor” del sacerdote Sánchez Adalid

 

La obra ensalza la majestuosidad de la Catedral Gótica de Toledo y el guion se convierte en un tratado de antropología de la compleja historia de la Iglesia en España, reyes y nobles

 

 

 

José Francisco Serrano Oceja | 28/11/25


 

 

 

Nada hay en Toledo que no sea Imperial. También el Teatro Rojas, espacio y tiempo de ciudadanía, ornamentación clásica, círculos de la trama y el drama de la existencia, levantado el telón de las leyendas a la media luz de nuestro tiempo, como es la vida, con sus grises, son sus luces y sombras que acompañan a los personajes allí retratados que hacen historia.

 

 

 

  1. 800 años de la primera piedra de la Catedral Primada
  2. Consagración postmoderna
  3. Compleja historia de la Iglesia
  4. Virgen Blanca

 

 

 


El arzobispo de Toledo, monseñor Cerro Chaves,
en el estreno del documental
“Catedral Primada. Ocho siglos de fe y esplendor”.

 

 

 

800 años de la primera piedra de la Catedral Primada

Teatro territorio secular para un sereno y atractivo diálogo entre fe y una cultura hecha vida en la historia.

Se presentaba ayer noche el documental “Catedral Primada. Ochos siglos de fe y esplendor”. No un documental más. No cualquier documental. Pistoletazo de salida de los 800 años de la primera piedra de la Catedral Primada.

En primera fila el arzobispo de Toledo, monseñor Cerro Chaves, que bien se merece una alegría. Junto a él, su auxiliar, don Francisco César, que así le llaman en su diócesis, con los dos nombres, conjunción de tiempos verbales; el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, con cierta facilidad para el discurso improvisado, y alguna que otra sorpresa.

No es un documental. Es el santo crisma de una consagración cultural postmoderna de la Seo Toletana. Primeras imágenes del volver y volver de la historia. San Ildefonso que se mezcla con el arzobispo Jiménez de Rada. Impactos visuales que son trampolines de sentido. La palabra, el texto, el milagro de un autor que maneja el tiempo como un compás de gracia. Protagonista también el arzobispo de Toledo, monseñor Francisco Cerro Chaves, que habla cuando calla, que actúa cuando no se nota.

 

Consagración postmoderna

A partir de las primeras escenas, se desvela el sentido de esta consagración postmoderna, después de ciertas profanaciones que montaron una buena tangana.

Jesús Sánchez Adalid, el más comprado y vendido autor de novela histórica, con su reluciente clerygman que hizo exclamar a la señora que tenía detrás de mí en el pase, “anda, pero si Adalid es cura”, aparece en escena reclamando la presencia de uno de los curas “influencers” con más seguidores de la Iglesia católica toda, el sacerdote mejicano Heriberto García Arias, el cura guapo de Tik Tok, un ángel de purita gracia.

“Dios mío, se te fue la mano”, decía una joven sentada a mi izquierda, que este cura se come la cámara, se mete a fondo a explicar a las nuevas generaciones la historia, la vida, el sentido, la trascendencia que fue, es y será la Catedral de Toledo. Don Heriberto parece salido de un retablo de pura naturaleza, fragmenta las escenas y secuencias, se ve mucho trasfondo de gramática de redes sociales.

 

Compleja historia de la Iglesia

No es éste un documental más no es éste un documental cualquiera sobre ochocientos años de fe que se hace vida. Es pura perspectiva. La compleja historia de la Iglesia, que también cabildea. España, sus Reyes, nobles, cielo dentro, infierno fuera, protagonistas que emergen y que se difuminan, validos válidos como anti ejemplo, el diálogo con los muertos que están vivos, los misterios de la vida del Señor, que lo llenan todo, como la liturgia, tiempo y espacio sagrados, la bendita diferencia entre lo sagrado y lo profano que hace que lo sagrado disuelva la tensión de la naturaleza caída.

El vuelo del dron de la historia, imágenes inéditas. El documental es algo más que documental. Con el guion de Sánchez Adalid se convierte en un tratado de antropología, no sé si agustiniana o tomista, siempre propositiva, un tratado del Deo creante et elevante en plan Instagram, un lenguaje que se entiende.

 

Virgen Blanca

El documental “Catedral Primada. Ocho siglos de fe y esplendor” concluye con la resignificación que vuelve a la significación primera. Junto a las imágenes de ese regalo del cielo que es la Virgen Blanca, la mirada de la madre y la caricia, esa caricia que se vuelve música con el Ave María de Juanito Valderrama, que nos dio la sorpresa de un guiño que toda las mañanas le hace al Señor de la Historia.

Un Ave María de sones mejicanos, por eso del aniversario viniente de las apariciones de la Guadalupe Toledana. La madre de ternura y el Corazón de Cristo también interpretado en tonalidades mayores de rojo de fondo, un expolio que no es cultural sino que es esperanza de redención.

Todo esto y mucho más en el documental “catedral Primada. Ocho siglos de historia”.