Opinión

La pérdida del pudor, las modas

 

 

Daniel Tirapu


Jóvenes.

 

 

 

 

 

El pudor es natural, sonrojarse también y tener un espacio de intimidad es muy sano. Hace treinta años leí un ensayo de Choza sobre el sentido del pudor y ahí hay más cera que la que parece que arde.

No entiendo como en programillas, ante millones de personas un tío cuenta que está colado por una secretaria y que cuando se va la susodicha, huele el asiento y vaya usted a saber, y además dice que tiene novia. El consejo de la sexóloga de turno es que lo hable con su novia o que vaya al sexólogo.

Insisten en que no hacen ninguna valoración moral, pues éste y espectáculos peores o parecidos, pues yo sí la hago y me parecen guarradas asquerosas, y algunos cobran.

El Catecismo de la Iglesia dice que lo peor del sexo despersonalizado es la mentira, aparentar que se ama sin amar, realizar actos desprovistos de su sentido verdadero. Pues eso, el pudor es importante, no pacato y estúpido. Algunas mamás visten a sus hijas muy mal y lo único que van a pescar es un buen catarro. Y en una tele privada o pública no son éticos esos espectáculos de vivencias lamentables pasadas por polígrafo.

Decir que no se hacen valoraciones morales es ya una valoración moral, que con ese cuento me excluye.

Estamos de pasarelas hasta el idem. No creo que nadie se atreva a llevar lo que pasean. Entonces te hablan de tendencias. Estar de moda, estar a la moda. La moda es muy efímera y no se puede establecer un sistema de vida sobre la moda. Basta ver una foto de hace 20 o 10 años y darte cuenta de que todo no era tan fashion. Como mundo efímero, las modas vuelven, se reciclan.

Un amigo mío mayor tenía seis trajes y le dije tira esto que está anticuado. Me dijo: no que ya volverá la moda. Efectivamente han vuelto las chaquetas de solapa grande, las de tres botones. La moda es como el lazo o la guinda. Coco Channel dijo ya hace mucho tiempo que hay que ir un poco por detrás de la moda. Sabia.

 

 

Daniel Tirapu
dtirapu@ujaen.es