Cáritas | Noticia • 20 Febrero 2019

 

Día de la Justicia Social: El comercio justo, respuesta integral contra la pobreza

 

La Coordinadora Estatal de Comercio Justo presenta un informe sobre Bangladesh que constata cómo es posible reducir la pobreza.

 

 

 


 

 

Con motivo de la celebración del Día Mundial de la Justicia Social (20 febrero), la Coordinadora Estatal de Comercio Justo (CECJ) –de la que forma parte Cáritas Española— hace público el informe “El Comercio Justo y la erradicación de la pobreza. El caso de Bangladesh” en el que describe cómo el Comercio Justo contribuye a reducir la pobreza y, por tanto, a avanzar hacia el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por Naciones Unidas.

Como ejemplo de ello, el estudio analiza los beneficios que el Comercio Justo genera para las mujeres de la organización artesana BaSE de ese país asiático, que se dedican a la producción de cestas de yute, artículos de textil, decoración y calzado.

Sus trabajadores y trabajadoras, organizados en 17 grupos de producción en distintas zonas del país, obtienen una remuneración de unos 10.000 takas (unos 4,40 dólares al día), lo que les permite mantener una vida digna y que supone el doble del salario mínimo legal en el país, fijado en 5.000 takas (1,80 euros al día). Además, BaSE facilita a las trabajadoras servicios básicos como salud, educación o créditos.

En Bangladesh —un país con un 40% de su población en la pobreza— pese al aumento de la exportación de textil (que supone el 80% de sus exportaciones totales) la pobreza no se ha reducido en la misma medida, entre otros factores, porque el crecimiento se ha hecho en base a competir en bajos salarios y con escasas inspecciones laborales.

En todo el mundo existen más de 1.500 organizaciones productoras de Comercio Justo, entre las que hay una gran diversidad. Algunas de ellas, como BaSE, están dirigidas a personas en situación de especial vulnerabilidad.

 

La pobreza global en cifras

La pobreza es una realidad compleja, consecuencia de múltiples causas y que ofrece distintas caras. Una de las más evidentes, el hambre, ha crecido en los últimos tres años. Actualmente afecta a una de cada nueve personas en el mundo. Asimismo, según Naciones Unidas, más de 800 millones de personas viven con menos de 1,25 dólares al día, muchas carecen de acceso a alimentos, agua potable o saneamiento adecuados.

Por otra parte, la pobreza extrema afecta al 11% de la población mundial. Otra de las caras es la precariedad laboral. La OIT calcula que casi un tercio de la clase trabajadora mundial vive en la pobreza. Una realidad que sufren de manera especial a las mujeres. En todo el mundo, ellas registran un Índice de Desarrollo Humano más bajo que los hombres. La brecha salarial de género en todo el mundo se sitúa en el 23%. Junto a ello, el 74% de las personas que viven en la pobreza sufren de forma directa los efectos de la degradación de la tierra.

El informe publicado por la Coordinadora ha contado con financiación de la Unión Europea.

 

Trabajo de Cáritas Española en Bangladesh

Cáritas Española lleva más de 10 años de trabajo continuado en Bangladesh a través de proyectos de apoyo al desarrollo integral indígena, a la reducción y prevención ante riesgos de desastres, así como a la mejora de las condiciones socioeconómicas en zonas urbanas de extrema vulnerabilidad.

Una de las líneas que se apoya a través de Cáritas Bangladesh es el Comercio Justo, enfocado especialmente desde la garantía de derechos, el trabajo digno, el empoderamiento socioeconómico de la mujer y la justicia social.