La Fundación San Cándido moderniza sus instalaciones para responder a las "exigencias actuales de la sociedad"

 

La entidad ha presentado oficialmente un nuevo pabellón de 12.400 metros cuadrados, que incluye 172 nuevas plazas residenciales.

La herencia legada por la familia Portilla Noval al Patronato de la institución fue el estímulo que originó la construcción del nuevo edificio.

Esta inauguración es un hito histórico que coincide con la celebración del 90 aniversario del comienzo de la atención a personas dependientes.

 

 

Santander, 25 de mayo de 2018


 

 

La Fundación San Cándido ha presentado oficialmente el nuevo pabellón que ha construido para ampliar su residencia de mayores, ubicada en Santander. Se trata de un edificio de 12.400 metros cuadrados dividido en cuatro alturas que permitirá a la entidad disponer de 172 nuevas plazas residenciales. La inauguración de esta infraestructura constituye un hito histórico para la institución que el próximo domingo celebrará el 90 aniversario del comienzo de la atención a personas dependientes.

Cientos de personas han asistido al acto oficial de presentación de unas instalaciones pensadas para mejorar la calidad de vida de los residentes y sus familias. Eva Díaz Tezanos, vicepresidenta del Gobierno de Cantabria, y Gema Igual, alcaldesa de Santander, han encabezado la representación institucional de un evento al que también ha asistido el Obispo de Santander, Manuel Sánchez Monge, así como representantes de la Universidad de Cantabria, el ICASS o el Centro de Estudios Regionales. El Patronato de la institución al completo, residentes y familiares han completado un aforo que ha sobrepasado ampliamente las 300 personas.

La inauguración de las nuevas estancias ha permitido dejar libre el módulo central de la residencia, construido en 1970, y que actualmente está en proceso de reforma. Este proyecto supone un paso más en la "modernización y adaptación de todos los módulos de los centros a las exigencias actuales de sociedad". En su intervención, José Olano Sánchez, presidente del Patronato de la Fundación San Cándido, destacó "el respeto a la dignidad de las personas, la calidad asistencial y el compromiso ético" como principales valores de la institución.

En su intervención, la vicepresidenta del Gobierno de Cantabria ha felicitado al Patronato, al equipo directivo y a los trabajadores del centro por hacer de San Cándido un lugar "con unos estándares de calidad muy elevados" . Díaz Tezanos ha destacado la apuesta "valiente" de la institución por alcanzar una "constante mejora de las instalaciones que les sitúe a la cabeza en los avances de atención a las personas mayores".

Por su parte, Gema Igual significó que San Cándido es un institución "intergeneracional", en la que se combina el cuidado de las personas mayores con la atención en los pisos tutelados y el servicio de guardería. "Lo más importante para un ayuntamiento es ocuparse de las personas" continuó la alcaldesa. "Necesitamos responder de manera integral a las necesidades de nuestros vecinos".

 

12.400 metros cuadrados sin barreras arquitectónicas

Al igual que los dos pabellones anteriores, la nueva infraestructura se ha levantado en torno a un jardín de 20.000 metros cuadrados que constituye el eje principal de la residencia. Amplios pasillos, libres de barreras arquitectónicas, comunican las 172 nuevas habitaciones, de las cuales el 70 % son individuales. Todas ellas disponen de baño privado adaptado a las necesidades de los residentes.

Se trata de un edificio moderno y funcional diseñado por el arquitecto Ignacio Ortiz. Las zonas comunes disponen de una decoración contemporánea, muy alejada del concepto tradicional de residencia geriátrica. Del mismo modo, la señalización escogida, basada en alegres dibujos, facilita la independencia de los residentes.

Además de explicar todas las comodidades de las que dispone el edificio, durante el acto también se ha explicado el principal estímulo que ha llevado al Patronato de la Fundación San Cándido a acometer este proyecto. En julio de 1985, Dª Carmen Noval deja como heredera de sus bienes, tras el fallecimiento de su hija Carmen Portilla Noval, a la Fundación San Cándido. Conscientes de que el legado constituía una serie de bienes considerable, la dirección de la institución analizó diversas posibilidades para que esa inyección de capital revertiese directamente en el bienestar de los residentes.

Dª Carmen Portilla Noval, afectada por una parálisis cerebral, fallece en octubre de 2013. Desde entonces, su legado ha sido un elemento dinamizador para la actividad del centro. Bien es cierto que los bienes no han servido para costear al completo todas las iniciativas emprendidas pero es igualmente verdad que han sido el punto de partida de múltiples propuestas. Entre ellas, la construcción del nuevo edificio, la adecuación de una sala específica de estimulación sensorial o el desarrollo de un estudio de investigación en colaboración con la Universidad de Cantabria, titulado "Estudio para la aplicación de señales neurofisológicas al diagnóstico clínico precoz de patologías neurodegenerativas".