Crónica de Roma
Ha presentado en Roma su libro ‘No basta con un click

El ex portavoz de la Conferencia Episcopal argentina alerta: el problema de la comunicación de la Iglesia está en las diferencias de matices entre medios católicos

Jorge Oesterheld revela que el Papa, cuando era obispo de Buenos Aires, le animaba a escribir como si se dirigiese “a alguien que no sabe leer”

El sacerdote Jorge Oesterheld, portavoz de la Conferencia Episcopal Argentina desde 2002 hasta 2014 ha presentado en la Pontificia Universidad de la Santa Croce de Roma su libro “No basta con un click” durante un coloquio titulado “Comunicar como Francisco: Misión (Im)posible”. En su libro, el sacerdote argentino señala algunos de los defectos de la comunicación dentro de la Iglesia así como los problemas de comunicación a los que debe hacer frente.

El sacerdote argentino Jorge Oesterheld, ha señalado durante la presentación de su libro que tuvo lugar ayer que “la Iglesia cuenta con unos límites, pero se debe buscar una lenguaje que la gente entienda. El propio Papa Francisco cuando era Cardenal en Buenos Aires me decía: ‘Tienes que escribir como si lo hicieses a alguien que no sabe leer’”.

Durante el coloquio, el sacerdote argentino ha declarado que “en el libro también hablo de las voces institucionales, que no son solamente el Papa o los obispos. Hoy en día uno de los mayores problemas de la comunicación de la Iglesia no son las agencias de noticias o la prensa amarilla, el gran problema son la gran cantidad de agencias católicas, que cada una de ellas pone su matiz a lo que ha dicho el Papa. Es habitual ver en los diferentes medios, malamente conocidos como católicos, que después de una rueda de prensa del Papa, titulen ‘La Iglesia dice que…’ y esto es un grave error”.

Sobre el Papa ha afirmado: “Francisco representa a una institución pero también sabe mostrarse libre de ella, sabe expresar lo que siente y sus opiniones sin alejarse de la Iglesia, y esto la gente lo valora. No es un robot que repite argumentos. Hay muchas instituciones en la Iglesia y cada una es independiente, cada una de ellas representa las distintas posturas de la Iglesia”.

Buen periodismo o mal periodismo

Volviendo al tema del concepto de ‘periodismo católico’ el ex portavoz de la Conferencia Episcopal Argentina ha argumentado que “nadie puede atribuirse a sí mismo el nombre de católico. Eso es potestad de la Iglesia. Yo no me pondría el cartel de católico a todo lo que hago.  Cualquier medio de comunicación se equivoca. Lo que importa es el buen periodismo o el mal periodismo”.

El coloquio ha contado con la presencia de José María la Porte (decano de la Facultad de Comunicación de la Santa Cruz),  Silvina Pérez (responsable de la edición española del  Osservatore Romano) y los periodistas Andrés Beltramo y Antonio Pelayo.

En opinión de Silvina Pérez “Francisco, como objeto mediático, basa su discurso en la identificación, la inclusión y la trasparencia. Esto le permite hablar de manera universal a todas aquellas personas que consumen medios de comunicación”. La periodista argentina ha señalado, como ya constato para Religión Confidencial Dario Edoardo Viganó, que “la comunicación institucional es un gran reto para la Iglesia”.

Silvina Pérez declara asimismo que una de las reformas que se pretenden realizar dentro de los medios de comunicación de la Santa Sede es la referida a la interpretación. “Si no hacemos esto, estamos dando terreno a los medios privados  y agencias internacionales que son respetables, pero no persiguen el objetivo de la evangelización”.

La Iglesia y los periodistas

Por su parte el periodista Andrés Beltramo ha calificado el libro de Oesterheld como “un trabajo realista que nos ayuda a entender alguna de las cuestiones mediáticas que afectan al Papa en su relación con la prensa y el mundo moderno. Francisco aprende de aquellos de los que se rodea”.

Beltrano sostiene que “uno de los temas más interesantes de la obra de Oesterheld, es el referido a la relación entre la Iglesia y los periodistas. Quién se ha dedicado a la comunicación de la Iglesia, sabe que esta tiene una tendencia a la confidencialidad y en ocasiones se prescinde de los periodistas”.

Incidiendo en esto, Beltramo ha señalado que “la Iglesia sigue discutiendo si los periodistas son buenos o no, y muchos sacerdotes y obispos siguen cerrando las puertas a los periodistas generando confusiones y molestias. En este libro expone ciertos defectos en el mundo de la comunicación de la Iglesia sin esa crudeza periodística”.

Otro de los grandes problemas que se mencionan en el libro es el referido al concepto ‘periodista católico’. En este sentido, Beltramo ha señalado que “no veo que existan un pizzeros católicos o zapateros católicos. Este concepto como se señala en el libro es un reduccionismo de la profesión periodística. Esto puede suponer una barrera como señala el padre Jorge”.  

La congruencia es otro de los temas centrales del libro. “La obra señala que lo que hace importante alguien en los medios de comunicación es el lugar que ocupa en la sociedad. Es más importante trabajar con los que sufren que ser obispo. Pero esto no es porque los obispos estén desprestigiados, sino porque la sociedad experimenta día a día la pobreza, pero no experimenta las preocupaciones de los obispos. La sociedad quiere que las instituciones prediquen con el ejemplo. Aquí reside el gran valor del Papa. Francisco es una persona congruente, que actúa según sus palabras” ha señalado el periodista.