7.03.11

La renovación de la Liturgia (I)

A las 9:30 PM, por Guillermo Juan Morado
Categorías : General

 

En 2003, el Papa Juan Pablo II promulgaba una Carta Apostólica, “Spiritus et Sponsa” en el XL aniversario de la constitución “Sacrosanctum Concilium” sobre la sagrada Liturgia.

Es muy interesante volver a este texto del Papa, que reafirma la importancia de la constitución sobre la Liturgia: “en la Constitución sobre la sagrada liturgia, primicia de la “gran gracia que la Iglesia ha recibido en el siglo XX” (Novo millennio ineunte, 57; cf. Vicesimus quintus, 1), el concilio Vaticano II, el Espíritu Santo habló a la Iglesia, guiando sin cesar a los discípulos del Señor “hacia la verdad completa” (Jn 16, 13)” (n.1).

¿Qué se propone Juan Pablo II en esta Carta? Persigue tres objetivos:

1) “redescubrir los temas de fondo de la renovación litúrgica impulsada por los padres del Concilio”;
2) “comprobar de algún modo su recepción”;
3) “y mirar al futuro”.

Veamos, pues, el recorrido que sigue el Papa. Nos centraremos, en este post, solo en el primer punto:

1. ¿Cuáles son los temas de fondo de la renovación litúrgica impulsada por el Concilio Vaticano II?

En el balance de la Constitución conciliar, el Papa señala los siguientes méritos de la misma:

a) “En ella se delinean luminosamente los principios que fundan la praxis litúrgica de la Iglesia e inspiran su correcta renovación a lo largo del tiempo (cf. n. 3)”; a saber:

i. “Los padres conciliares sitúan la liturgia en el horizonte de la historia de la salvación, cuyo fin es la redención humana y la perfecta glorificación de Dios”.

ii. “Cristo se hace presente, de modo especial, en las acciones litúrgicas, asociando a sí a la Iglesia”.

iii. “Toda celebración litúrgica es, por consiguiente, obra de Cristo sacerdote y de su Cuerpo místico, “culto público íntegro” (n. 7), en el que se participa, pregustándola, en la liturgia de la Jerusalén celestial (cf. n. 8)”.

iv. “Por esto, “la liturgia es la cumbre a la que tiende la acción de la Iglesia y, al mismo tiempo, la fuente de donde mana toda su fuerza” (n. 10)”.

b) “La perspectiva litúrgica del Concilio no se limita al ámbito interno de la Iglesia, sino que se abre al horizonte de la humanidad entera”.

i. “La vida litúrgica de la Iglesia, tal como la presenta la constitución Sacrosanctum Concilium, asume una dimensión cósmica y universal, marcando de modo profundo el tiempo y el espacio del hombre”.

ii. “el Concilio afirma que toda acción litúrgica “es acción sagrada por excelencia cuya eficacia, con el mismo título y en el mismo grado, no iguala ninguna otra acción de la Iglesia” (n. 7). Al mismo tiempo, el Concilio reconoce que “la sagrada liturgia no agota toda la acción de la Iglesia” (n. 9)”.

c) “Con respecto a las diversas realidades implicadas en la celebración litúrgica, la Constitución presta atención especial a la importancia de la música sagrada”.

d) “Otro tema de gran importancia, que se afronta en la Constitución conciliar, es el que atañe al arte sacro”.

(Continuará…).

Guillermo Juan Morado.